Iniciaremos el día con visitas a ambos castillos en la mañana. El Castillo de Hohenschwangau con los Alpes Bávaros como telón de fondo y los lagos Alpsee y Schwansee a sus pies lo hace una visita imprescindible en la Baviera alemana; al admirarlo se entiende el por qué Maximiliano II se enamorara del lugar; esta fue la residencia de infancia del rey Luis II de Baviera que en aquel idílico entorno soñó convertirse en un rey de cuento; de hecho, a la edad de 18 y recién coronado como Luis Il de Baviera, mandó construir Neuschwanstein, cuyas obras de construcción podía contemplar desde su habitación.

El Castillo de Neuschwanstein es una construcción de ensueño rodeada por un hermoso paisaje que inspiró al mismísimo Walt Disney para la creación del castillo de la Bella Durmiente siendo el castillo más icónico de toda Alemania- Por la tarde visitaremos Oberammergau, este hermoso lugar concentra toda la fantasía de un cuento en su tramado y arquitectura medieval, pero además, para los cristianos fervientes cada 10 años tiene lugar una importante fiesta en torno a la Pasión de Cristo. La aldea es preciosa en sí misma y tiene muchos edificios antiguos hermosamente decorados. Es un ejemplo de un colorido y pintoresco arte bautizado Lüftimarelei el cual es un estilo de dibujo que decora las fachadas de muchos pueblos y aldeas de Baviera, frescos cargados del estilo barroco italiano- Aquí en Oberammergau verás muchas casas decoradas en colores pastel, prácticamente casi todos los edificios están decorados en este pueblo y por eso es que todo el conjunto recuerda a las ilustraciones de un cuento de hadas como las de Caperucita Roja y también Hansel y Gretel.